Los alumnos de la escuela de educación primaria Father Liebermann en el valle de Mangola (Tanzania) han comenzado sus clases después de finalizar las obras de construcción de este centro, en el que Prodiel ha colaborado donando 8.500 euros. Esta inversión ha sido empleada para rehabilitar el edificio de una antigua iglesia abandonada, reconvirtiéndola en la cocina y el comedor del colegio.
De momento son 40 niños y niñas, de entre cinco y siete años, los que ya están recibiendo clases en esta escuela, que aumentará su capacidad anualmente creando 7 niveles (7 aulas) hasta llegar a los 14 años, con lo que alcanzaría el máximo de su capacidad con 280 alumnos.
El Proyecto Mangola nació hace más de 25 años, cuando los sacerdotes José Aguilar y Miguel Ángel Lozano llegaron al valle de Mangola, situado entre N´gorongoro, el Lago Eyasi y la meseta del Serengeti, con la idea de crear labores misioneras y sociales que mejoraran la vida de una de las regiones más afectadas por la pobreza en Tanzania. La iniciativa está centrada en mejorar la educación y la sanidad de los habitantes de este valle al norte del país. La población de este lugar está compuesta por tribus cazadoras y ganaderas, y algunos agricultores de cebolla.
En cuanto a la sanidad, el proyecto cuenta en la actualidad con el Hospital Askofu Hando, galardonado con el premio nacional tanzano al centro hospitalario rural que más ha reducido la mortalidad infantil. Entre sus servicios sanitarios se encuentran dos quirófanos, un área de maternidad, diversos programas de vacunación, tratamientos contra el VIH y otros muchos que han contribuido a aumentar la esperanza de vida, reduciendo hasta cifras mínimas la mortalidad en la región.
Gracias a la reducción drástica de la mortandad infantil, la población de niños en edad escolar se ha multiplicado en un breve periodo de tiempo. Para atender esta necesidad educativa, se han construido doce escuelas primarias y se ha ayudado en la construcción de otras tres, de manera que, en estos momentos el 95 por ciento de los niños en edad de cursar educación infantil en la región están escolarizados.
